En el quinto le puse un tapete que había hecho hace tiempo con bolillos, las letras me las bordó Alba.
Un par de mandiles o delantales, uno con magdalenas.
Claro que nos dieron las dos y media de la madrugada,como siempre, Alba y yo cosiendo y Elena tejiendo, es lo que hacemos en las reuniones que tenemos los fines de semana en la casa del pueblo.
Y por último la merienda.
Esperamos trabajar otro poco el próximo fin de semana.